Relatos de JJavi, dos viernes en Madrid- junio 2025

 Aqui relatos que JJavi, comenta sus tardes noche en madrid unos viernes de junio 2025.

 

He estado en unos de los bares dos viernes seguidos. El primero muy flojo, éramos 4 o 5. Había quedado con un conocido-amante para ese viernes. Llegué sobre las 11 pero mi cita llegaba más tarde, había 4 o 5 tíos y ninguno de mi gusto excepto un chico, un turista que imagino era americano, no hablaba español, que iba con un amigo o pareja, pero a mí me gustaba él, no el acompañante y no se separaban. Me miraban los dos y en un momento se empezaron a enrollar y el amigo me hizo señas para unirme. No sé si os ha pasado esto, que hay dos, gusta uno y el otro no y hay que decidir si pagar el peaje o no jejeje. Yo lo hice y nos enrollamos los tres pero pasaban los minutos del manoseo y besuqueo y ahí nadie bajaba a merendar, así que luego de un rato me aparté para dar una vuelta pero el panorama era penoso y mi cita no llegaba. Me fui a la zona donde está la cabina de música a esperar y mi sorpresa es que llega el americano otra vez pero solo, más enrollamiento pero nada más, si no le gusta comer como que no lo veo. Me fui a beber algo al bar y al fin llegó mi cita, se veía cansado pero esas tetas, esa espalda y esos brazos lo compensan. Me quedo esperando en los taburetes mientras se quita la ropa. Viene, se pide una cerveza, me dice hola y en un segundo se pone de rodillas... Así sí! Este tío no me falla nunca con su boca. Además la come mirándote a la cara. Lo único malo que tiene es que no es mucho de garganta profunda, yo intento metérsela hasta el fondo y follarle la boca pero no aguanta, no puede. A mí me gusta meterla hasta el fondo, que mis huevos lleguen a los labios del mamón, que se atragante y pida respirar. Algunos tíos son muy buenos haciéndolo. Pero aún así es una maravilla, la coge con la mano y la come desde el capullo hasta más atrás, hasta que puede una y otra vez una y otra vez y mirándote a la cara con los ojos levantados, pero no sabe abrir la garganta para llegar al fondo. Con él siempre suelto gotas de precum y parece que le gusta. A veces es tanto que me pregunta si me he corrido dentro de su boca, le digo que no pero que si quiere lo hago, abre la boca, me enseña la lengua, pero luego no pasa. Viene el americano otra vez y comparto la boca de mi cita con él a ver si así avanzamos y, efectivamente, también le gusta follar boca. Mi cita de rodillas con una polla en la boca y otra en la mano, intercambiando rabo y llenándose la boca. Me pone mucho cuando en vez de rodillas se pone en 4 a mamar y puedo alcanzar su culo con mi mano y darle cachetes. Intenta meterse los dos rabos en la boca pero es algo que no me gusta porque inevitablemente mi capullo roza dientes y eso no me gusta nada. Estuvimos ahí un rato y luego descansamos para hablar un poco. Me doy cuenta que no queda ya nadie en el bar, solo nosotros dos, así que rematamos. Se pone en cuatro como a mí me gusta y empieza a comer, yo como siempre intento follarle la boca un poco más fuerte pero no hay manera, le dejo comer con tranquilidad, eso sí yo empiezo a controlar el ritmo porque estoy cansado me quiero correr e ir. El come y disfruta,para que disfrute más le doy cachetes en el culo o la aprieto los pezones. así estamos un rato. A ratos saco mi rabo duro y se lo restriego por toda la cara, por los labios, le doy golpes de pollazo en la boca, en las mejillas y se la vuelvo a meter en la boca. Estoy a punto de correrme...y si no le aviso y le suelto todo dentro como él dice a veces que quiere? ...

Siempre me dice que la próxima en su boca, pero luego nunca la abre o gira la cabeza, siempre se arrepiente en el último minuto. A mí me da igual, a mí me gusta ver cómo a los tíos les mancho la cara, si puede ser el bigote, si tienen la boca abierta o cerrada me da igual. Descartó la idea, y le doy las ultimas embestidas a su garganta cerrada, la saco de su boca, levanta la cabeza como para que caiga en su cuello o pecho pero no me apetece así, saco mi lado dominante, le bajó la cabeza, se la giro y le suelto le leche en la mejilla y veo como le chorrea. Me encanta pero hubiese preferido en la cara de frente, en el bigote, en los labios, a ver si alguna vez pasa. Luego de eso nos fuimos y yo agradecido de mi cita que de lo contrario hubiese sido un día para olvidar.
El siguiente viernes regreso y.fue todo muy distinto, el local estaba muy animado y un tío alto, guapísimo y de culo respingón me rondaba regalándome una gran sonrisa. De las mejores noches que recuerdo en este bar. De esos días que no sabes por qué pero gustas más y todos los guapos quieren contigo. Este relato en otro mensaje,...