Un comentario muy interesante sobre sexo sin protección y VIH.

Pongo aqui un comentario que me parece muy interesante:

"He estado leyendo los comentarios publicados en este blog acerca del tema del “barebacking”, de follar sin condón, y quiero aportar mi experiencia y mi opinión, desde el respeto a los juicios de aquellos que tengan un punto de vista diferente del mío. Sé que soy seropositivo desde hace 28 años, me contagié por realizar sexo sin protección cuando creíamos que esa misteriosa enfermedad, que luego denominarían SIDA, afectaba a gais en los EE.UU y pensábamos que no llegaría a convertisrse en una pandemia Yo he tenido suerte, porque, aunque me contagié hace muchos años, mi organismo ha sido capaz de mantener en raya al maldito virus hasta la aparición de los tratamientos retrovirales. Si bien es cierto que no hay sexo sin riesgo, desde que sé que soy seropositivo, he puesto todo de mi parte para evitar propagar el virus, fundamentalmente por responsabilidad hacia los demás, pero también para evitar reinfectarme o pillar algún otro tipo de enfermedad venérea que pudiera afectar negativamente a mi salud y al nivel de carga viral del VIH. Hay personas que como son seropositivos deciden tener sexo sin protección porque, para qué, si gracias a los retrovirales tienen al virus controlado, y si la carga viral es indetectable es muy probable que no lo transmitan. Es probable, pero no se sabe a ciencia cierta, además está el tema de la reinfección: una persona seropositiva se puede volver a infectar y esta vez puede que sea con una cepa del virus que sea resistente a los retrovirales.En cuanto a estos: si bien mantienen al virus a raya, no dejan de tener muchos inconvenientes. Por un lado, porque el virus consigue crear resistencias y unos retrovirales dejan de ser efectivos y hay que probar con otros, y por otro lado, porque, como ocurre con todos los medicamentos para enfermedades crónicas, tienen muchos efectos secundarios, y a la larga, como una vez que se empieza con el tratamiento ya hay que seguir con él toda la vida, o hasta que se descubra una alternativa, los retrovirales terminan afectando a los riñones, al hígado, a los niveles de colesterol y triglicéridos, etc...Si uno folla sin condón con alguien que está infectado con el VIH, hepatitis B o C, u otra enfermedad venérea, uno está poniendo en riesgo su salud y la de los demás. Y como las personas infectadas pueden ser asintomáticas, es imposible saber si un compañero sexual es o no portador de una ETS. Que una pareja sexual parezca sana y saludable no significa que lo sea. Hay que recordar que el VIH no es un único virus, hay unos 10 subtipos del mismo, y inumerables cepas del jodido virus. Si uno se vuelve a infectar con una segunda o tercera cepa, eso ocasiona lo que los investigadores denominan una “super infección”, lo que disipa el mito de que las personas seropositivas con el virus controlado pueden tener relaciones sexuales sin protección sin preocuparse por una reinfección.Yo creo que no merece la pena lo del riesgo del “barebacking”, y que es importante hacerse el test para conocer si uno es seropositivo o no, para evitar contagios. Cuando salimos de marcha, a tomar copas, a ligar, la realidad del SIDA y los mensajes acerca del sexo con menos riesgos nos parecen distantes, pero no debemos de ignorarlos, por nuestra salud y la de nuestros semejantes. Es posible que algunos puedan cerrar los ojos, pero eso no es posible cuando has pasado por la experiencia traumática de peder a alguien querido. El sexo sin protección es jugar a la ruleta rusa, no creo que valga la pena el riesgo. Para mí la vida sin sexo no es una alternativa, pero seguiré poniendo todo de mi parte para mantenerlo lo mñas seguro posible, por respeto a los demás y porque, si en todos estos años he conseguido no reinfectarme, no quiero echarlo todo a perder por unos minutos de sexo sin protección."